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La pandemia nos cerró muchas puertas, pero también abrió algunas inesperadas, llevándome a mí y a mi esposa por caminos de cartón, fichas y estrategias. En un intento de alejarnos de las pantallas y encontrar alternativas de entretenimiento, nos sumergimos en el mundo de los juegos de mesa, comenzando con clásicos como Scrabble y Risk. Sin embargo, la chispa real se encendió al explorar juegos mas modernos, de esos que venden en las librerías, buscando opciones que, en un futuro, pudieran involucrar a nuestros hijos en horas de diversión compartida.

Razones para Jugar en Pareja

Más allá del entretenimiento, jugar en pareja ha tejido nuevos hilos en nuestra relación, mejorando nuestra comunicación, ofreciéndonos tiempo de calidad juntos y presentando desafíos mentales. Es una forma de paciencia, de comprensión mutua ante la derrota y la victoria, y, curiosamente, una práctica de cómo convivir con alguien que disfruta ganándote en un tablero. Esperamos que, con el tiempo, estos juegos se conviertan en herramientas para que nuestros hijos ofrezcan a sus amigos experiencias únicas, llenas de aprendizaje y diversión.

Pareja jugando un juego de mesa en el que la esposa ha ganado y celebra mientras el esposo mira frustrado el tablero

Sin duda soportar esas victorias inesperadas de nuestra media naranja nos fortalecerá en paciencia.

La lista de Juegos Recomendados:

Sin ningun orden específico, aqui les dejo la lista de los juegos que les recomiendo, den clic en el nombre para ver una reseña detallada de cada uno:

  • Azul Mini: Versión compacta de un juego de aspecto llamativo acerca de montar mosaicos de azulejos. Jugadas ágiles que requieren versatilidad ante los cambios repentinos de ritmo.
  • Catan: Nuestro primer paso hacia los juegos modernos. Ideal por su simplicidad y dinámica de negociación. Ha sido puente para conectar con familiares más jóvenes y, el reemplazo definitivo del turista.
  • Código Secreto Duo: Perfecto para parejas que disfrutan de los desafíos lingüísticos y la cooperación. Una prueba tanto para el vocabulario como para la conexión de ideas.
  • Carcassonne: Un juego relajante y estratégico que se adapta perfectamente a la duración deseada. Ideal para charlas profundas mientras construyes ciudades y caminos.
  • Patchwork: A pesar de su aparente complejidad, es sorprendentemente accesible y compacto, convirtiéndolo en una excelente opción para viajes.
  • Virus! y Virus 2: Evolución: Si tuviera que elegir solo uno, sería este. La expansión enriquece enormemente la experiencia, convirtiéndola en una elección imperdible para cualquier pareja.
  • Star Realms: Un giro inesperado en nuestros gustos, este juego de cartas de combate nos atrapó con su temática y dinámica, siendo un favorito recurrente.
  • Seven Wonders Duel: Una competencia estratégica en la antigüedad. Este juego nos sumerge en la gestión de civilizaciones, desafiándonos a equilibrar la victoria militar, cultural o civil. Ideal para parejas que buscan un desafío estratégico con una rica temática histórica.
  • Ouch!: Su simplicidad y la posibilidad de adaptarlo para los más pequeños de la casa lo hacen especial, siendo el primer juego de cartas de nuestra hija.

Consejos para Elegir Juegos

A lo largo de este viaje, he refinado mi criterio para seleccionar juegos. Prefiero aquellos optimizados para dos jugadores, evitando complejidades innecesarias y duraciones extensas. Los blogs de juegos y las reseñas han sido mis faros en este mar de opciones, buscando siempre juegos que no monopolizen la mesa ni el tiempo. La paciencia al esperar rebajas ha resultado fructífera, permitiéndome acceder a juegos maravillosos sin desequilibrar el presupuesto.

Solo el Principio:

Nuestra aventura a través de los juegos de mesa ha sido más que solo diversión; ha sido un aprendizaje, una forma de desconectarnos digitalmente y conectarnos más humanamente. Ha influido en la forma en que nuestros hijos nos ven y, espero, en cómo elegirán entretenerse en el futuro. Si buscas enriquecer tu relación y ofrecer a tus hijos alternativas de ocio significativas, sumergirte en el mundo de los juegos de mesa podría ser la clave.